En la segunda ruta que hemos desarrollado en el mes de enero, caminamos sobre un terreno lleno de contrastes, tanto paisajísticos como vegetales. Descubrimos unos lugares maravillosos de los que estamos convencidos de que vamos a volver cuando necesitemos alejarnos del mundanal ruido.
35 fotos Canon G7X
Ruta en Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/los-partidos-chinyero-circular-64534990
1. Comenzamos la ruta por una pista agrícola, que nos presentó a los lados un sinfín de rincones de fresca naturaleza para acudir con la familia a merendar o a disfrutar de un relajante día al aire libre.
2. Y desde el primer momento hizo acto de presencia nuestro padre Teide, con su majestuoso traje de invierno.
3. Dejamos atras la pista de cemento y nos adentramos ya en un camino mucho más rústico, que poco a poco nos fue llevando hacia un paisaje lleno de bellos contrastes.
4. Adentrándonos en el monte, empezamos a descubrir que un mundo diminuto estaba proliferando bajo la humedad que pisaban nuestros pies.
7. Ya en pleno monte volvimos la vista atrás y volvimos a entender aquello de que somos afortunados.
Pues eso mismo.
10. Respetando las normas y los consejos es como lograremos preservar para generaciones venideras cada delicado entorno.
11. Un poquito más adelante nos encontramos con este canal de agua que nos hizo pensar que había cerca alguna galería, de la que se podrían abastecer del líquido elemento las tierras de cultivo de esta zona de la isla.
13. Un antiguo monstruo antediluviano quedó petrificado cuando intentaba escaparde las lenguas de fuego que enviaba el volcán.
15. Y como un regalo a los sentidos, apareció nuestro padre Teide, danzando sobre su verde jardín y la lava de sus volcanes.
20. Aunque se desprenda de su corteza quemada, el resistente pino canario siempre renace de las llamas que intentaron devorarlo.
21. Cuando la atmósfera esta limpia, el espectaculo está en contemplar la grandiosidad de cada una de nuestras islas vecinas.
31. Formas caprichosas nos aguardaban, en un entorno en el que el verde y la fresca brisa embriagaban nuestros sentidos.
35. Y cuando aparecieron las últimas luces de la tarde, concluimos esta aventura, recogiéndonos pero sin parar de imaginar otras nuevas...¿y quien puede hacerlo si vive en este paraíso?
¿Hasta pronto?
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